Insite en El Plaza Condesa

Un reencuentro con la edad en la que cantar canciones de amor y desamor era lo único que importaba, logró que la vieja y nueva escuela del emo - punk - rock mexicano, se reunieran ayer por la noche en el concierto de Insite.

Si estuviste en el concierto de Insite ayer puede haber tres razones:

1. Eres fan.
2. Te gustaban cuando tenías 17.
3. Alguien te invitó y no tenías idea de qué onda, pero llegaste ahí.

En caso de ser el punto no. 3 la razón que te llevó la noche de ayer al Plaza Condesa, deberías agradecer a esa persona por hacerte partícipe de tan valiosos momentos. Y digo valiosos porque la escena del emo - punk - rock - hardcore de hace diez años, definitivamente ya no es la misma de ahora, aunque si hay algo que caracteriza a ambas, es la unión que existe entre las bandas y su público. Y precisamente eso, fue lo que se vivió anoche.

A pesar de que en este show, Insite se dedicó a todo el EP Otra Historia, y lo demás casi --exclusivamente-- a tocar los temas de su disco de 2012, Ahora Soy Yo Contra El Mundo, la gente no paraba de corear los temas. Hasta adelante del recinto de la Condesa, estaban los fans-fans, esos que se saben todas las letras y no titubean un segundo; en medio, aquellos ya no tan adolescentes individuos, que disfrutaron la música de la banda de Mexicali cuando era todo un rush por allá de los 2000'es; atrás, a los que ya les pesan los pies y querían estar cerca de las barras de alcohol y bocadillos.

El ambiente en general se sentía muy bien; cuando Konrado, Kar, Gabo, Miky y Johis, salieron al escenario y empezaron los acordes de "Sola", el público se amontonó y trató de llegar lo más cerca que se pudiese del escenario. Pasaron canciones como "Otra historia", "Roces accidentales", "Me amarás al amanecer", "Vuelve en la mañana", "Inolvidable" y "Me puedo ir en paz", pero fue con "Siempre me dejas" y "Cielos que lloran", que la furia de los asistentes abrió sus gargantas.

También interpretaron "Piensa en que", "Las mismas cosas" y "Tus últimas horas"; sin embargo, quedaron a deber temas del Una Vida No Es Suficiente de 2007. Sí, lo digo por "Destrózame". Un momento gracioso, fue cuando acabó "Continuación" y Konrado exclamó: "Dice Kar que si le regresan su virginidad". Muchos rieron. Al final, no podía faltar el hit que los despechados y tristes corazones queríamos escuchar, por supuesto, hablo de "Rojo Azul".

Así se cerró un concierto que inició con el acto abridor de Camiches, banda capitalina de feeling core que se ha ido abriendo campo en la escena independiente mexicana y supongo, se encontraba más que emocionada de tocar en un escenario como El Plaza.